El partido fue una dura derrota para Argentina, que no tuvo reacción ante el juego británico. Posteriormente, eliminó a Bélgica con un 6-3, y en semifinales derrotó a Egipto con un contundente 6-0. La final fue ante Uruguay, que venía de ser campeón en los en los Juegos Olímpicos de París 1924. Luego de empatar 1-1, se disputó un partido de desempate.