Era una de las selecciones más novatas nunca presentadas por Inglaterra. En los cuartos de final, vencieron a Camerún 3-2 luego de un tiempo extra, logrando su pase a las semifinales tras 24 años. El hecho de que todavía no se permitían las sustituciones, hizo que los primeros minutos de partido los italianos perdiesen a un jugador por una fractura en el pie debido a una dura entrada de Ted Drake.